APRENDIENDO A VIVIR

SOMOS LO QUE COMEMOS Y LO QUE PENSAMOS: Nuestra salud mental depende en buena medida de nuestro sistema de creencias y de nuestra alimentación.
Este blog quiere ser un punto de encuentro para las personas que buscan una explicación, para los que no comprenden; aquellos y aquellas que buscan con una actitud libre y abierta respuestas...
...quiere ser una herramienta a favor de la tolerancia, la justicia y la libertad...
...un instrumento para tomar el control...
...una ayuda para conocerse mejor, comprender la existencia humana, nuestras necesidades y apegos...
...en definitiva una herramienta para llenar nuestro vacio interior y recuperar la confianza...

martes, 28 de febrero de 2017

"JUSTICIA"

"El conocimiento sin justicia debería llamarse astucia en lugar de sabiduría". Platón

Decía Paul Auster que si la justicia existe, debería ser igual para todos; nadie puede quedar excluido, ya que de lo contrario, no sería justicia. Para Platón, la justicia es la virtud en la que confluyen todas las demás, y está basada en la idea del Bien, que le proporciona armonía al mundo. A través de la justicia conseguimos la felicidad, por medio de la prudencia, la templanza y la valentía. Aristóteles diría que la justicia es igualdad proporcional.
El concepto de justicia constituye una de las piezas básicas y más complejas del lenguaje moral. En el lenguaje común se intuye que las personas deben recibir el trato que se merecen. "Dar a cada uno lo suyo", como diría Ulpiano. Al principio, el término justicia estuvo relacionado con justeza, juntura o ajuntamiento de los seres con el orden divino. Para los griegos ese orden era la Physis. La justicia no es algo que debamos esperar, sino algo que debemos procurar y buscar. La tendencia de relacionar justicia y leí, ha derivado en la aplicación de normas que han beneficiado siempre a una élite en detrimento del pueblo, por lo que el criterio de justicia no se puede limitar al ámbito legal, ya que justo no es lo mandado, sino lo debido. 
Existen principios éticos y jurídicos universales, ahistoricos e independientes de la voluntad humana, que proceden del Logos, naturaleza divina del Kosmos y que puede ser conocidos por el ser humano con ayuda de la intuición, la inteligencia y la razón. Sin embargo "el derecho" termina siendo un fenómeno histórico cuyo contenido depende de las circunstancias concretas del tiempo y el lugar en donde se desarrolle. Según Hobbes, reemplazado por mandatos emanados del "soberano"   para proteger al hombre del hombre, de esta forma, el soberano pasa a ser el "lobo", con la excusa de ofrecer a los ciudadanos la felicidad. 
Hart y Nino dicen que hay principios de justicia universalmente válidos que se pueden conocer a través de la razón. Lo que hoy se llaman "derechos humanos" no son más que una nueva forma de derecho natural cuya validez es independiente de lo que dispongan las normas del derecho positivo. Son facultades y poderes innatos del ser humano que los posee por el mero hecho de serlo. La naturaleza de la que se derivan los principios universales es la naturaleza del Kosmos; si se quiere, la naturaleza de Dios, que incluye "las sociedades y la/s historia/s", y la naturaleza de la persona como parte indivisible del Kosmos. 

domingo, 26 de febrero de 2017

"PRUDENCIA"

"El que es prudente es moderado; el que es moderado es constante; el que es constante es imperturbable; el que es imperturbable vive sin tristeza; el que vive sin tristeza es feliz; luego, el prudente es feliz". Séneca 


La realidad se manifiesta a través del individuo. El sujeto es la base de la realidad. Todo lo que constituye la realidad, tiene por condición un sujeto, y no existe más que para el sujeto. El mundo es su representación. La materia no existe independiente de la percepción. Existencia y percepción son conmutables, lo que nos lleva a afirmar que realidad "física" y realidad trascendental coexisten. 
   
A través de la persona, se manifiesta el deseo de la voluntad de vivir, inconsciente y libre que crea su propia conducta y su propio mundo. De esta forma, la realidad, no es más que, o bien producto del deseo de la voluntad de vivir, o de la acción consciente de la persona, ya que, la naturaleza de la persona encuentra su expresión en sus actos. 
    
Las cosas que nos pasan son obra de la voluntad de vivir. Frente a lo "que nos pasa" están las acciones que son obra de nuestra elección. La felicidad se logra a través de estas últimas; de las cosas que hacemos en relación a las cosas que nos pasan. Lo importante para nuestra felicidad es nuestro modo de ser, nuestra personalidad. 
  
La cuestión fundamental es que podamos adquirir un buen carácter, gracias al cual, el modo de comportarnos en la vida sea el más adecuado y el que más felicidad nos proporcione. Las acciones correctas, nos proporcionarán mayor grado de felicidad. Conductas como la generosidad, amabilidad, honestidad, sinceridad, nobleza, valentía, justicia, etc., provocan felicidad. Para alcanzar la conciencia de este tipo de conductas, es necesario entrenar la prudencia que nos lleva a elegir para actuar correctamente. Para actuar con prudencia, no tenemos más que elegir la regla del término medio que nos ofrece Aristóteles. 

sábado, 18 de febrero de 2017

"LO SUBLIMINAL"

"El pensar en si tiende a ser reemplazado por ideas estereotipadas". Max Horkheimer

     La psicología, en la actualidad se utiliza como disciplina basílica en el desarrollo de la publicidad como mecanismo de persuasión en la venta de productos de todo tipo. El uso del mensaje subliminal está generalizado en una sociedad que se sustenta en el consumo como un fin en si mismo. Los mensajes de publicidad y propaganda, nacen en Estados Unidos a partir de la Segunda Guerra Mundial. Desde los años cincuenta o sesenta, que comienzan a utilizarse de forma solapada, y negada siempre, invaden nuestra vida cotidiana, apoderándose de nuestra intimidad, para manejar nuestra voluntad y nuestra volición, en detrimento de nuestro crecimiento personal. 
     El mensaje subliminal accede a nuestro sistema cognitivo sin apenas percatarnos. Ya decía Demócrito, "hai muchas más cosas perceptibles de las que podemos percibir conscientemente". Platón y Aristóteles reconocieron fenómenos equivalentes. No somos conscientes de que estamos siendo manipulados con falsos mitos de libertad humana, el falso mito de la racionalidad y el falso mito de la percepción objetiva. La información camuflada que se percibe de forma inconsciente, provoca emociones y deseos  consumistas, respondiendo a intereses creados con fines comerciales, financieros y políticos. 
    La psicología puede utilizarse para crear una maquinaria que penetre la condición humana y llevarla a pensar, sentir y actuar de una forma interesada. La publicidad crea y excita las necesidades, los deseos y las pasiones, minimizando los esfuerzos de las personas para satisfacerlos. Para que sea efectiva es necesario que exista el germen de un deseo y/o opiniones comunes. Por eso los medios de comunicación atraen la atención sobre temas recurrentes como el fútbol, o determinados roles en películas y series, para asociar a estes intereses el mensaje del producto que se quiere vender o la idea que se quiere insertar. 
     La publicación de Owen Jones es un claro ejemplo de intento de manipulación de la opinión pública en la "demonizacion de la clase trabajadora". El "chav" es una persona de clase baja, normalmente joven, aficionada a la ropa deportiva y de marca. En la serie "Little Britain" se podía identificar el personaje de Vicky Pollard, madre soltera y adolescente, que viste un chandal rosa, roba chuches en el supermercado y busca quedarse embarazada para cobrar las ayudas sociales con el mensaje subliminal del estereotipo de la "clase trabajadora", reducida a una "especie irresponsable, indeseable y parásita" en la que nadie se reconoce. A esto hay que añadir que la pobreza y el paro no sean percibidos como problemas sociales y la radicalización y demonización de las protestas legítimas en defensa del derecho a la educación, la sanidad, la vivienda y el trabajo. Es llamativo el papel de los medios de comunicación transformados en "una élite cerrada en una burbuja de privilegios y desconectada de los problemas reales de la gente".

viernes, 17 de febrero de 2017

"MEMORIA"

"El discurso no es aquello que traduce las luchas o los sistemas de dominación, sino aquello por lo que, y por medio de lo cual se lucha, aquel poder del que quiere uno adueñarse". M. Foucault

     El discurso habla necesariamente del ser o la sustancia. Enlaza verbos y adjetivos en la participación del mundo sensible con el mundo inteligible. El discurso tiene su raíz en el Ser que se hace "verbo". En el "Fedro", Platón habla del mito de "Theuth", según el cual, la escritura hará más sabios a los egipcios y aumentará su memoria. La escritura es un estímulo para la memoria, pero no hay que confundir rememorar con reminiscencia, la anamsesis con la hipomnesis. Los discursos, verdaderos o falsos, son una especie de Graphesthai en nuestra  alma que es ella misma "el libro".
     La memoria funciona como una tablilla de cera en la que se escriben los discursos y se conectan con las "ideas". El conocimiento intelectual es básicamente reminiscencia en la dialéctica de las ideas y el discurso. La dialéctica hace retornar una y otra vez a la conciencia los contenidos del alma en donde está escrita "la verdad".
    La "fuente de la luz" produce "epojé". Las ideas procedentes del alma llevan impresa la sustancia del Kosmos. El acceso a "la verdad" es el acceso a la memoria del Ser. El vocabulario está plagado de imágenes y la reminiscencia supone una acción espontánea en la recuperación de las imágenes que están impresas en el "libro del alma". 
     En el alma residen las ideas que permiten la evidencia, la claridad y la distinción. La tarea del intellectus es despertar a la conciencia las "inscripciones" de la "remanencia". Cuando el discurso queda atrapado en el "yo", en la superficie, en la mera afirmación del ego, queda atrapado por el. La "remanencia" permite superar la subjetividad porque retiene el material que le ha sido inducido; "todo lo pretérito". 

"VOLUNTAD"

"En el espíritu del tiempo de cada época hay un afilado viento del este que sopla a través de todas las cosas. Yo puedo encontrar huellas de ello en todo lo que se ha hecho, pensado y escrito, en la música y en la pintura, en el florecimiento de este o aquel arte; deja su marca sobre todas las cosas y sobre cada uno." Arturo Schopenhauer 
     
Para Carl Gustav Jung, "el si mismo" es el centro de la conciencia; una magnitud infinitamente compleja, la conciliación de los contrarios, la fusión del mundo de las tinieblas con la luz. "Estoy cansado de ser algo parecido a mi mismo cada día...", diría el poeta desde el umbral de la conciencia. Según René Descartes, Willian James, o Antonio Damasio, no existe el pensamiento sin más, sino, "mi pensamiento y mi emoción".
       
La conciencia es la representación del "yo"; su percepción del mundo, su punto de vista. Siempre apunta hacia un lugar y nos da la impresión de que es unificada y contínua. J. Eccles, fundamentado en la teoría de los tres mundos de Karl Popper, piensa que la estructura del cerebro no puede explicar los fenómenos de la conciencia. Ouspensky opina que existen cuatro estados de conciencia: "vigilia, dormido, conciencia de si mismo y conciencia objetiva".
   
Realmente, solo vivimos en dos estados, la mayor parte dormidos, y la otra, despiertos, aunque difiere muy poco del sueño. En la sociedad actual, muchas personas, viven sin un propósito durante algunas décadas, y mueren sin haberse preguntado nunca lo que es la conciencia o la libertad. 
   
El ser humano "se hace" cuando vive a partir del "si mismo", buscando la "verdad" interior, consciente de que es una búsqueda interminable. Decía María Zambrano, "la confesión trae a la luz el carácter fragmentario de toda una vida, ese sentirse un trozo incompleto (...) en espera de encontrarse, de reconocerse".
      
Dice Schopenhauer que podemos conocer la voluntad a través de la conciencia. La volición individual no es más que una manifestación limitada de la voluntad que se proyecta en el mundo. La voluntad es inconsciente, ciega, y se manifiesta en el amor por la vida; pero, como diría Píndaro, "somos dueños de una sombra...".
     
María Zambrano y Jung coinciden en que, "El estado del sueño es el estado inicial de nuestra vida; del sueño despertamos, la vigilia adviene, no el sueño; abandonamos el sueño por la vigilia, no a la inversa". Para los pitagóricos, el sueño era una aproximación a la muerte, tenían que purificarse antes de dormirse, por si se encontraban con los muertos. Algo que también recomendaba Séneca. 
    
El tiempo (la duré), es condición sine qua non para vivir humanamente, lo que implica el ejercicio de la voluntad. El ser humano es responsable de vivir su vida (su tiempo), y luego, padecer la trascendencia, lo que implica tensión; pero necesita ir hacia algo, cumplir su proyecto vital. La persona es un proyecto presente que se hace impulsado por la energía de la voluntad. 
     

lunes, 13 de febrero de 2017

"EQUILIBRIO"

"Debemos tener siempre fría la cabeza, caliente el corazón, y larga la mano". Confucio

Los cuerpos tienen una disposición en círculo y en el cuerpo humano se dan principio y fin. Platón completa el círculo en el "Fedón", cuando dice: "¿Hay alguna cosa contraria a la vida o no? Si, la hay, dijo. ¿Que es? La muerte". Pero también la muerte tiene su contrario, lo inmortal.  
Aristóteles escribió: "Dicen que los principios de las cosas están dispuestas en parejas de contrarios...". La mayor parte de las cosas humanas son parejas de opuestos: lo blanco y lo negro, lo dulce y lo amargo, el bien y el mal... Alcmeón sostiene que la base de la salud es el equilibrio (ísanomian) de los poderes (dynámion); equilibrio entre los dos polos que tienen todas las cosas. 
Hay que mantener siempre abiertos los sentidos a los aspectos irracionales de la conciencia; pero sin perder de vista el lado racional, ya que sería invitar a la enfermedad. En el inconsciente coexisten lo bueno y lo malo, al igual que la naturaleza es hermosa y terrible a la vez. Decía Jung: "De lo malo me ha llegado mucho bien (...) es solo al aceptarlas (las cosas) cuando podemos asumir una posición hacia ellas (...) Así que ahora pretendo jugar al juego de la vida siendo receptivo a lo que venga..., bueno y malo, sol y sombra (...) y aceptar mi propia naturaleza con sus lados positivo y negativo (...) Sustentando los opuestos podemos exponernos a la vida en toda nuestra humanidad".
Sócrates nos enseña que la naturaleza humana participa de lo divino. El Tao nunca para, es fluir permanente. Lo divino está en permanente movimiento, es el Todo, la Unidad, y en lo divino no existe la polaridad. Jenófanes de Colofón dice: "pues él todo entero ve, todo entero piensa, todo entero siente...". Más tarde Séneca diría: "Es la naturaleza la que me da todo esto... Todas las veces que quisieres te es lícito cambiar el nombre del autor de nuestros bienes... Todos los nombres que te plugiere darle le vendrán bien como que signifiquen una potencia o efecto celestial..."

domingo, 12 de febrero de 2017

"PODER NATURAL"

"El hombre es la medida de todas las cosas". Protágoras 


     Decía Lao-Tsé, "el ser completo conoce sin ir, ve sin mirar y consigue sin hacer". El organismo humano tiene la misma propiedad de autoregularse que posee la naturaleza, con sus mismas propiedades, equilibrio y armonía. Al ser la persona un microkosmos, en ella reside la capacidad de restaurar el equilibrio roto.
    Como anticipara Demócrito, el ser humano reproduce la naturaleza del kosmos (Physis tou Pantós). Decía Edward Bach: "A ninguno de nosotros, en esta tierra, se le pide que haga más de lo que esté en sus manos hacer, y si nos esforzamos en obtener lo mejor de nosotros mismos, la salud y la felicidad constituyen una posibilidad cierta para cada uno de nosotros".
   La armonía intrínseca de la Physis, con sus principios activos, es capaz de restablecer el equilibrio perdido, en la sangre, caliente y húmeda como el aire, que emerge del corazón y aumenta en primavera; la bilis negra, que se origina en el bazo, fría y seca como la tierra, que aumenta en otoño; la flema, fría y húmeda como el agua que aumenta en invierno; y la bilis amarilla, caliente y seca  como el fuego, que emerge del hígado y aumenta en verano.
     La persona posee la vis medicatrix naturae para restablecer el desequilibrio que procede del exceso o del defecto, calor, frio, desnutrición (interna y externa), y desorientación; que se inicia en la sangre, en la médula, en el cerebro o en la mente. Unas veces por causas externas: humedad, ambiente, agotamiento o privación; otras, por causas internas, que tienen que ver con el ajuste psicológico.
     Una dietética que combine estilo de vida, alimentación y ejercicio físico previenen desequilibrios severos para evitar el phármakon o la cirugía; pero el pesimismo, el odio, la envidia, la ira, la tristeza, la venganza, el tedio, y la pobreza de espíritu, enferman el alma, por lo que es necesario evitar lo maldicente,  lo vulgar, lo ruín, el vicio, el chisme, el rumor, la indolencia y la vanidad.

jueves, 9 de febrero de 2017

"COGNITIO"

"Hay dos maneras de vivir la vida: una como si nada es milagro; la otra como si todo fuese un milagro". Albert Einstein

"Y tu que en la noche oscura has abierto los ojos y te has levantado." Vicente Aleixandre

     Hoy, la metafísica del espíritu tiene que ceder ante la metafísica de la matería; pero, en el fondo, la materia no es otra cosa que Dios, despojado de antropomorfismo. Podemos suponer que el alma proviene de un principio espiritual tan inasequible como lo es el origen de la materia.
     Nuestros antepasados suponían que el alma es sustancia divina inmortal y que una fuerza propia del alma edifica el cuerpo, mantiene su vida y cura sus males; que existen espíritus incorpóreos, con los que el alma tiene relaciones, y un mundo espiritual más allá de nuestro mundo. El hombre original siente en las profundidades del alma la fuente de la vida. La vida y el alma existen antes y después del yo, como lo atestiguan los sueños y los estados cercanos a la muerte como el síncope.
    Las culturas originarias utilizaban los sueños y las visiones como fuente de conocimiento, de ahí que se le atribuya al alma un saber superior de procedencia divina. Decía Popper que "el ingenio es pariente cercano de la locura y ambos están separados por una delgada pared". El mismo Aristóteles afirmaba: "nullum mágnum ingenium sine mixtura dementiae fuit"; Platón decía, que "quien ve en las cosas perecederas cosas eternas parece loco"; y Goethe, en el Torcuato Tasso, nos muestra la constante transformación del genio en loco.
      La psique inconsciente es una fuente inagotable de conocimiento, de hecho, Carl Jung afirmaba, que el inconsciente dispone de percepciones subliminales que rozan lo maravilloso. Decía Einstein que "la imaginación es más importante que el conocimiento". En el genio, los recuerdos están preñados de reminiscencias y de fábulas. La idea de "Conservación de la energía" de Roberto Mayer, contada por Heim, ilustra como irrumpe el inconsciente en el genio: "...que el nuevo pensamiento de R. Mayer no se desprendió lentamente de los conceptos tradicionales de fuerza, mediante profunda meditación sobre ellos, sino que es una de esas ideas percibidas por intuición, que naciendo de otras regiones de naturaleza espiritual se apoderan, por decirlo así, del pensamiento, y lo obligan a transformar los conceptos tradicionales".
     Del mismo modo que el "loco" "queda atrapado" en el inconsciente, pierde el hilo de la conciencia, y no percibe el mundo de la división y de las relaciones, el genio olvida el principio de razón suficiente, y no busca, ni ve las cosas, más que de una forma intuitiva; percibe la esencia y no la relación de las cosas entre si. Lo que contempla, aparece ante sus ojos con más luz, mientras el resto de los objetos y sus relaciones retroceden a la oscuridad.








domingo, 5 de febrero de 2017

"TEMPLANZA"

"...Y en nuestra disposición a adentrarnos en lo desconocido, el campo de todas las posibilidades, nos sometemos a la mente creativa del que dirige la danza del Universo". El Upanisad Mundaka 

Con frecuencia se entiende la templanza como freno, limitación o represión de las energías vitales; pero el término latino temperantia significa equilibrio emocional y serenidad ante los embates de la vida. Se refiere a crear la armonía a partir de componentes dispares. La finalidad es llevar el orden y la calma al interior de la persona para canalizar las fuerzas vitales, de forma que se conviertan en fuente de energía para la realización personal.

El equivalente griego de templanza es Sophrosyne, sinónimo de sensatez, mesura, discreción, sabiduría, prudencia, disciplina, moderación y autodominio. La templanza procura el equilibrio en el uso y disfrute de la vida y, en la satisfacción de las necesidades básicas: comer, beber, sexo, amor, sentido de pertenencia... Asegura el dominio de la voluntad sobre los impulsos y, mantiene el deseo en los límites de la solidaridad. En su contra, la intemplanza, destruye la capacidad de percibir los pequeños detalles e impide sumergirse en la esencia de las cosas, tan importantes para la vida diaria y el crecimiento personal, condenando a la persona a quedarse en lo superficial.
     
Aseguraba Platón que "sin Sophrosyne no es posible la salud física y mental" : "...es el alma (psique) lo que hay que cuidar primero, si se quiere tener sanos la cabeza y el cuerpo". Escribió en el "Cármides" que bajo la acción de la palabra placentera, el alma, y a continuación su cuerpo, se serenan, se esclarecen y se ordenan. Para Aristóteles, la Sophrosyne es el medio para llegar a lo excelente, y lo excelente es el punto medio entre los extremos, el exceso y el defecto.
    
Marco Aurelio, escribió en sus meditaciones: "Haz acopio (...) de aquellas cosas que dependen unicamente de ti, la sinceridad, la dignidad, la fortaleza, la moderación, la bondad, la libertad, la sencillez, la serenidad, y la grandeza de ánimo (...) No ocupes la mente con pensamientos innecesarios que solo son fuente de dolor y de engaño". La persona moderada, es dueña de si misma para tomar el control de su vida, se siente libre interiormente para tomar decisiones y para asumir las consecuencias de sus actos. A través de la templanza, la vida recobra los motivos que la intemplanza difumina.
   
      

miércoles, 1 de febrero de 2017

"AMOR"

"Siete son los senderos que cruzan el huerto infinito, y cada uno deberá transitarse con el cuerpo, el corazón, y la mente". Evangelio Esenio de la Paz

Decía Rabindranth Tagore, "si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas" y, J. Paul Sartre que, "la felicidad no consiste en hacer lo que uno quiere, sino en querer lo que uno hace". Según Filón de Alejandría, el "Logos" era un agente espiritual que hacía de mediador entre Dios y el mundo. La felicidad, igual que la "verdad", son expresiones del "Logos", ley o razón universal que gobierna el mundo. El que quiera ser feliz, debe aceptar, como decía Lao-Tsé, que no hay felicidad sin desgracia, sin dolor y sin sufrimiento. Aceptar la vida es un constante devenir en permanente creación que se reafirma en el ahora. 

El amor con la "fides", transforma la razón en paz interior, en sentimiento y en intuición que llevan a la unidad con Dios. El sentido comprensible de la existencia es tomar conciencia del amor y a esta finalidad sirve todo el universo. No hay mirada más luminosa que la que procede del interior, del conocimiento de uno mismo que hace más comprensible lo universal. El amor es la mirada que nos descubre la belleza invisible de Dios. 

Ser amado es el eje sobre el que giramos a diario para vivir una aventura del conocimiento compartido sin límites en el que se idealiza al "otro",  no tanto por lo que es, como por lo que puede llegar a ser. El sentimiento y, más el amor, están íntimamente ligados al corazón. El amor, igual que el corazón, nos activa y nos renueva; a través de el se percibe el místerio de la creación; restaña heridas, cultiva la concordia y abre la mente a la comprensión.

Todo lo que nos sucede es atraído por nosotros mismos a nuestra vida sin apenas darnos cuenta, porque no somos conscientes de que nuestros pensamientos y nuestra mente está concentrada en los acontecimientos negativos o positivos que vivimos. Una forma sencilla de entenderlo es pensar en nosotros mismos como si fuéramos un imán que atrae lo que está en el pensamiento y en la mente. Dice, con acierto, W. Clement Stone que "cualquier cosa que la mente pueda concebir, puede ser lograda". Einstein estaba de acuerdo, cuando decía: "La imaginación lo es todo. Es la vista previa de lo que la vida va a traer".

Podemos sentir salud, amor, felicidad, porque el kosmos responderá a la naturaleza de nuestros sentimientos. "Creas tu propio universo sobre la marcha", decía W. Churchill. "A lo que te resistes, persiste", diría Carl Gustav Jung. Debemos seguir el consejo de J. Campbell y seguir nuestra dicha, para que el universo nos abra puertas donde solo había muros. 
     

"VIDERE"

"Y lo que sembramos es lo que cosechamos. Y cuando optamos por realizar actos que llevan la felicidad y el éxito a los demás, el fruto de nuestro karma es la felicidad y el éxito". Swami Wivekananda 

 "Esta frágil vasija, la vacías una y otra vez, y la vuelves a llenar constantemente de vida nueva. Esta pequeña flauta de caña la has llevado por valles y montañas, y has soplado en ella melodías eternamente nuevas (...) Recojo tus dones infinitos con mis manos, tan pequeñas. Pasan los siglos y tu todavía sigues vertiendo y todavía hay sitio para más". Rabindranath Tagore, Gitanjali 
   
"El mundo es mi representación (...) cuando el hombre conoce esta verdad, estará para el claramente demostrado que no conoce un sol ni una tierra, y si, unicamente un ojo que ve el sol y una mano que siente el contacto con la tierra...", decía Arturo Schopenhauer. El ser humano no puede hacer más que aprender a ver. Solo una observación atenta vence las resistencias y hace crecer el amor que es necesario para ver la sombra que hay que iluminar.  
      
El predominio de los procesos psíquicos sobre la realidad muestran una ilimitada influencia sobre la vida afectiva. Decía Jung: "...en la sombra se esconden los reproches, la falta de amor y de cariño, y la no aceptación...". Los "complejos" que surgirán de esas experiencias, abarcarán el sexo, la comida, el amor, y el sentido de pertenencia. Hay que buscar con Heráclito el "Logos" en el mundo físico, que es el reflejo visible de la trama invisible que lo sustenta. El que lo logra accede a un mundo en el que la discordia es amor y lo divergente se hace convergente. Es el fundamento, lo que da sentido a la vida, la norma y la regla que todo lo determina y que lo hace comprensible.
      
El corazón nos eleva, une tierra cielo, nos conduce al infinito porque está conectado con el universo. La ciencia ha demostrado que los sentimientos producen una química específica y que, a medida que cambiamos los sentimientos, cambiamos nuestra química. La química del amor reafirma la vida, mientras que la del resentimiento y del rencor, se manifiestan como sentimiento de culpa. Cuando amamos, generamos un campo magnético en nuestro interior que se proyecta hacia el exterior. Todo lo que "sabemos" o experimentamos determina nuestra elección y condiciona nuestro bienestar futuro. El verdadero sentido de la vida es hacer visible el amor, unir el cielo con la tierra.
     
La Forma que toman los acontecimientos en nuestra vida es una cuestión de enfoque. Nuestra actitud y predisposición a aceptar cualquier posibilidad sin prejuzgarla, sabiendo que podemos atraer o repeler una situación , es fundamental. Cada pensamiento, sentimiento, respiración, movimiento, son una forma de comunicarnos con el exterior y contribuyen a crear las situaciones que se producen en nuestro universo particular. A veces la contribución es directa, pero otras veces ni siquiera somos conscientes de ello. 
     
El temor y la fe son dos polos de una misma fuerza. La fe es convicción y seguridad. Fracasamos cuando dejamos de creer, porque dejamos de "ver". Las "culturas originarias" percibían de forma diferente porque tenían una gran confianza en el poder de la mente y la voluntad. Pensaban que ambas eran suficientes para cambiar la faz de la tierra. De nada sirve invocar si no se tiene fe, porque el poder mágico del acto será ineficaz.